Si bien se reforzó con gente grande, también le abre las puertas a los chicos del club: Vigo y Quiroz, seguros; Hernández, casi. Cadavid atrás y “Pulga” arriba de los nuevos.
¿Quién hubiera pensado que aquél viaje sorpresivo de Vignatti y Fleming a Curitiba, antes de la final sudamericana Paranaense-Junior de Barranquilla, terminaría con Julio Avelino Comesaña como DT de Colón?. Es que pasaron muchos días y muchas cosas, como por ejemplo que los sabaleros tentaron a Diego Dabove y los colombianos del Junior fueron campeones del torneo cafetero. Sin embargo, los planetas se alinearon y finalmente el experimentado DT terminó en Santa Fe.
“El entrenador más longevo de Sudamérica en llegar al éxito”, marcaban las redacciones sudamericanas, en obvia referencia a los 70 años de Comesaña que en apenas dos meses serán 71. Lejos de preocuparse por las apariencias, Vignatti aceleró y fue por Comesaña, haciendo un esfuerzo económico muy importante por fichar al campeón colombiano.
Ni bien pisó Santa Fe, el coach colombo-uruguayo dejó una frase tipo escudo protector antes que le preguntaran por su conocimiento del fútbol argentino, donde nunca dirigió: “La pelota es redonda en todos lados y este juego es uno solo, sin misterios”.
Luego, codo a codo con Vignatti, llegaron los refuerzos. Y como lo dijo alguien alguna vez “esta historia siempre es mitad y mitad”.
Aunque dio la sensación que los tres foráneos —Andrés Felipe Cadavid, Guillermo Celis y Wilson Morelo— fueron by Comesaña, mientras que la “Pulga” Rodríguez, Zuqui y posiblemente Esparza fueron nombres que venían siguiendo los dirigentes rojinegros.
Como si no fuera poco hacer foco en la edad propia (70 años), Comesaña debió responder por qué apeló a jugadores “grandes” como Cadavid, “Pulga” y Morelo. “No creo en las cédulas de identidad…”, devolvió la pelota a un toque el canoso adiestrador.
Claro que, por ahora, mientras sumó experiencia con los refuerzos, el equipo del debut ante el “Bicho Colorado” de La Paternal tiene una onda refrescante de parte de la nueva conducción: Alexis Vigo de “4”, Franco Quiroz de “3” y posiblemente Mateo Hernández —la duda es el chico o Zuqui— para hacer “Barullo” desde el vamos.
Este fue, sin dudas, un sello de Comesaña en el Junior de Barranquilla: poner a los canteranos, a los chicos de las divisiones inferiores. Otro será el equipo cuando Celis y Morelo puedan estar para arrancar. Hoy son los que están.
¿Qué dicen los jugadores del estilo Comesaña?: que la idea de juego pasa por crecer a partir de una tenencia “larga” de la pelota, bien con el sello de los equipos colombianos por más que el DT nació en Uruguay. Así se lo vio en el tester más importante que fue contra Nacional de Montevideo en Paysandú.
Argentinos Juniors, enfrente y de la mano de Dabove —chocan dos entrenadores debutantes—, se juega mucho en los 90 minutos de hoy, con caras nuevas que llegaron y con urgencias deportivas importantes a la hora de la sumatoria de puntos.
Uno supone un marco multitudinario en el Cementerio de los Elefantes para respaldar el estreno de Julio Comesaña en el banco sabalero y la vuelta de Colón ante su gente en este 2019, donde ya tiene asegurada otra participación copera internacional en la Sudamericana.
Ya murió la era del “Barba” Domínguez (la más larga de los últimos tiempos) y pasó el solidario interinato del “Bichi” Esteban Oscar Fuertes en la parte final del año pasado, con el duro golpe también de perder la final de la Copa Santa Fe.
Ya no está Ortiz como referente en la cueva, ya no es Correa el “9” goleador y tampoco marcan puntas Toledo, Escobar y mucho menos Clemente. Se fue Galván, cuevero que le gustaba a Comesaña.
Más allá de Comesaña, es otro Colón. No sólo por Cadavid y “Pulga”, más la duda de Zuqui. Se nota que hay una decisión deportiva (del DT) y una decisión política (de los dirigentes) de refrescar el equipo. La imágen final del 2018 fue responsable de esta refundación del once titular sabalero.
Este once titular, sería: Burián; Vigo, Olivera, Cadavic, Quiroz; Fritzler, Zuculini, Zuqui o Mateo Hernández; Bernardi, Heredia y Luis Rodríguez.
Después del partido de esta tardecita de lunes frente a Argentinos Juniors, Colón y Comesaña irán el sábado que viene a las 19.20 para visitar a Lanús en Guidi y Arias.
Morelo, jugador franquicia
Sin dudas, más allá de los buenos nombres que llegaron en este 2019, “el fichaje” es el de Wilson Morelo, delantero que viene de ser el goleador de la Conmebol Libertadores 2018 (9 goles) y que jugó los últimos 18 meses en Independiente Santa Fe.
El artillero, de 31 años, culminó su segunda etapa en el conjunto bogotano, con el que ya había ganado una Copa Sudamericana, una liga colombiana y una superliga. En el conjunto bogotano disputó más de 150 partidos y es el décimo goleador histórico con 72 tantos.
Morelo también jugó en Monterrey, Dorados y Pachuca; en los colombianos Rionegro Águilas, Envigado, Millonarios, América de Cali, Atlético Huila y Deportes Tolima, y en el Everton chileno.
Con cinco tantos Morelo también fue el máximo artillero de la Copa Sudamericana de 2015, que ganó con Santa Fe, y fue parte del equipo ideal del torneo.
Fuente: El Litoral
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