El femicida vivía cerca y por denuncias de violencia de género no podía tener contacto con ella. “Esperábamos el botón antipánico, que nunca llegó”, dijo la presidenta comunal. Primero encontraron el cuerpo del asesino a dos cuadras y tras los gritos de la hija adolescente de ambos el otro cadáver.

Fue un llamado anónimo pasada la medianoche de este lunes el que permitió conocer un doble hecho fatal que conmociona a la comuna de Cayastá, a 80 kilómetros al norte de la ciudad de Santa Fe: la Policía encontró dentro de una vivienda del centro urbano el cuerpo de un hombre de 42 años ahorcado.

Al llegar al lugar, los vecinos informaron sobre los gritos desesperados de una adolescente, que repetía “mi mamá, mi mamá”. En medio de un gran desorden, y en una vivienda a dos cuadras del primer hecho, hallaron fallecida con un cable alrededor del cuello a una mujer de 35 años que había sido pareja del hombre. La investigación judicial apunta a un femicidio seguido de suicidio. La presidenta comunal, Verónica Devia, confirmó que él tenía prohibido acercarse a su ex esposa desde hace dos años por reiteradas denuncias de agresiones. “Estábamos esperando un botón antipánico que nunca llegó”, agregó la funcionaria.

La fiscal de la Unidad de Homicidios Cristina Ferraro tiene a su cargo la investigación bajo la carátula preliminar de presunta muerte por violencia de género seguida de suicidio. Ordenó la intervención de la Agencia de Investigación Criminal y las demás medidas de rigor. En un primer momento, participó personal de la comisaría 5a local, que encontró los cuerpos.

El primer aviso fue cerca de la una de este martes y apuntaba a una dirección de calle Felipe Segundo sin número, en el centro de Cayastá. Allí vivía el hombre con su madre. Lo encontraron ahorcado en el patio, con un alambre. La hija de 13 años que los dos fallecidos tenían en común es la que desató la angustia del barrio con sus gritos y guió al segundo hallazgo, en calle Vera Mujica sin número, también en el centro de la comuna.

Una versión sin confirmación oficial indica que desde este lunes la mujer no contestaba los llamados de sus familiares. La presidenta comunal señaló que el presunto femicida había sido demorado el pasado 19 de noviembre por no cumplir las medidas de restricción. Fueron sólo 24 horas antes de que la Justicia ordenara liberarlo. “Estaban a dos cuadras de diferencia”, dijo la presidenta comunal.

El hombre fue identificado como Claudio Gustavo Gómez, de 42 años. Su ex pareja y todo indica que su víctima, como Fátima Viviana Ocampo, de 35.

Con información de El Ciudadano Web

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