La descripción que tiene la policía del sospechoso de cometer el crimen es de un hombre grandote, morocho y bien vestido. Policías capitalinos y pesquisas de la PDI, buscan imágenes de las cámaras de videovigilancia.

Este martes, cerca de las 16, falleció en el quirófano el hospital Cullen de Santa Fe mientras estaba siendo operado, Julio Cabal (hijo) de 29 años. El comerciante recibió un disparo cuando intentó defender a la empleada de su negocio Almacén del Norte, ubicado en avenida Urquiza entre Mendoza y Salta, cuando fueron asaltados.

Según los primeros trascendidos, el joven resultó baleado en el tórax cuando forcejeó con el delincuente. Fue trasladado por su padre, Julio Cabal, de 56 años, en un vehículo particular al hospital Cullen. Allí fue operado de urgencia en el quirófano central. Policías de Orden Público y de Cuerpos de la Unidad Regional I La Capital y pesquisas de la Policía de Investigaciones (PDI), ambas de la Policía de Santa Fe buscan a los asesinos.

Operado de urgencia

La empleada del negocio, al ver a Cabal tirado en el piso del local comercial, inmediatamente llamó por teléfono a Cabal padre, quien había salido del negocio minutos antes, y en medio de la desesperación le narró el suceso y le pidió que volviera urgente hasta el negocio.

Cabal padre, sin esperar un segundo, levantó a su hijo en brazos, lo ubicó en uno de los asientos de su vehículo particular y lo llevó hasta el hospital Cullen. Allí, bajó nuevamente con su hijo en brazos, lo llevó a la guardia adonde lo recibieron los médicos de la Emergentología, evaluaron la gravedad de la herida en el comerciante, lo compensaron y decidieron operarlo de urgencia.

Fallecido

Julio Cabal (hijo) luego de ser compensado fue operado e urgencia en el quirófano central del nosocomio público. Cerca de las 16 falleció cuando los médicos intentaban salvarle la vida durante la compleja intervención.

Denuncia

Los vecinos que viven en inmediaciones del local comercial donde se produjo el ataque criminal fueron los que dialogaron con la empleada del negocio, que bajo un fuerte ataque de nervios contó lo sucedido. Ellos fueron los que denunciaron el suceso a la central de emergencias 911. Después llegaron policías de la Comisaría 1ª y de la Brigada Motorizada, que fueron los que preservaron el lugar y posteriormente comunicaron la novedad a la Jefatura policial y a la central de emergencias 911 para articular el trabajo con los operadores de las cámaras de videovigilancia dispuestas en el sector.

Coincidencias

La descripción de algunos vecinos como de la empleada del local comercial coincidieron en afirmar que el asesino es de complexión física robusta, morocho y bien vestido, que luego de ejecutar la agresión contra Julio Cabal (hijo) escapó del negocio. Se ignora hasta el momento si lo esperaban uno o varios cómplices en algún tipo de vehículo.

Filmados

Por su parte, pesquisas de la Policía de Investigaciones (PDI) Región I, fueron los responsables de auditar las cámaras de videovigilancia existentes en toda la zona, como de dialogar con los vecinos, para conocer detalles sobre el suceso, y saber si existen registros fílmicos sobre la llegada del o los asesinos, y la posterior huida a los fines de su identificación.

Peritajes criminalísticos

Informaron la novedad sobre el suceso y sus características mortales a las Jefaturas de la Unidad Regional I La Capital y de la Policía de Investigaciones (PDI) Región I, ambos de la Policía de Santa Fe, y éstos hicieron lo propio con los fiscales de la Unidad Especial de Homicidios del Ministerio Público de la Acusación, los que ordenaron que el cadáver de Julio Cabal (hijo) fuera llevado a la morgue judicial para la realización de la necropsia, en tanto, fueran realizados los peritajes criminalísticos de rigor, los que fueron ejecutados por los agentes del área Científica de la PDI, los que hallaron una ojiva calibre 32 en la escena del crimen.

Con información de Uno Santa Fe

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