Una familia viajaba por la circunvalación oeste hacia el norte de la ciudad entre Mendoza e Iturraspe y le rompieron el parabrisas del auto de un piedrazo.

El hecho ocurrió el domingo a la tardecita. El golpe fue del lado del acompañante, asiento que ocupaba la mujer del matrimonio que en ese instante iba amamantando al pequeño hijo de seis meses. En el asiento trasero también viajaba otro nene de 2 años de edad.

El dato destacado: es la segunda vez en 15 días que le sucede un hecho similar. Martín Basualdo, víctima del ataque contó que su esposa iba adelante dándole la teta al bebé y que ambos terminaron con astillas esparcidas por su cuerpo. Hace 15 días ocurrió una situación similar. En ambas ocasiones, el conductor trató de mantener el control del volante y no detenerse.

“Nos cayeron pedazos de vidrio a mi señora, a mí y a mi bebé. Esta vez venían dos camiones grandes al costado y si movía el auto podría haber sido una tragedia. En circunvalación es habitual que te lluevan los piedrazos cuando oscurece”.

Fuente: Santa Fe 24 horas