El “Rey de la Soja” enfrenta un oscuro panorama: defaults millonarios, cheques rechazados y juicios ejecutivos que ponen en jaque al grupo Los Grobo. La crisis del sector agroindustrial desvela las grietas del esquema económico ultraliberal del gobierno de Javier Milei.

La tormenta económica que sacude al grupo agroindustrial Los Grobo no es una anomalía aislada, sino un síntoma alarmante de un modelo económico que, bajo el ala del gobierno de Javier Milei, privilegia los intereses especulativos sobre la estabilidad productiva. Las cifras no dejan espacio para la duda: entre el 2 y el 6 de enero, Los Grobo Agropecuaria SA registró 15 cheques rechazados por un total de $1.376 millones, mientras que Agrofina, otra de sus empresas, sumó tres cheques rebotados más por $950 millones. Un golpe devastador para el “Rey de la Soja”, que alguna vez simbolizó el auge del agronegocio argentino.

En un contexto donde la inflación galopante y la ausencia de políticas regulatorias desangran al mercado interno, Los Grobo notificó su incapacidad para cumplir con obligaciones financieras que alcanzan los US$10 millones, postergando pagos hasta marzo de 2025. La agencia FIX, afiliada a Fitch Ratings, no tardó en rebajar su calificación crediticia de BBB(arg) a C(arg), dejando claro que la empresa no está en condiciones de enfrentar sus compromisos financieros. A pesar de contar con inventarios valuados en US$65 millones y un saldo de caja de US$15 millones, los flujos operativos del grupo son insuficientes para contener la sangría económica.

El colapso de Los Grobo es un espejo fiel de los desequilibrios estructurales promovidos por la gestión de Javier Milei. En su cruzada por la “mano invisible del mercado”, las políticas del mandatario han profundizado la volatilidad en sectores clave como el agroindustrial, exponiéndolos a la especulación financiera y a la escasez de herramientas para amortiguar crisis. En este marco, el grupo enfrenta no solo la iliquidez del mercado de pagarés bursátiles, sino también la caída en las ventas de agroinsumos, un golpe doble que Agrofina y Surcos, otras empresas vinculadas al holding, no han podido resistir.

Surcos, además, enfrenta un escenario todavía más crítico. Con una deuda de US$500.000 en default desde noviembre de 2024, la empresa ha sido acusada penalmente por la Comisión Nacional de Valores (CNV) por presunto engaño a inversores, al emitir obligaciones negociables sin informar su verdadera situación financiera. Esto culminó en un embargo de más de $21 millones y una inhibición general de bienes que agrava aún más el panorama.

El discurso de Milei, que promueve la desregulación y la confianza ciega en los mercados, se enfrenta a su mayor prueba de fuego. Los Grobo atribuye su debacle a la acumulación de stocks y a la falta de liquidez en el mercado de pagarés, pero estas explicaciones técnicas ocultan una verdad más profunda: el desmantelamiento de las herramientas estatales para garantizar un entorno económico estable. La “retirada” del Estado no ha generado la prometida prosperidad, sino un campo de juego desigual donde incluso los gigantes del agro tambalean.

La caída de Los Grobo tiene implicancias que van más allá de su propio balance contable. Representa un golpe simbólico y real a la narrativa oficialista, que insiste en que los sectores agroexportadores son los grandes beneficiarios de su modelo económico. Con deudas que ascienden a US$207 millones y vencimientos de corto plazo por US$52 millones, el futuro del grupo y de miles de trabajadores pende de un hilo.

 

El caso Los Grobo es una advertencia urgente sobre los riesgos de un modelo económico que prioriza la especulación sobre la producción. Las políticas de Milei, lejos de consolidar una economía competitiva y estable, han generado un entorno de incertidumbre donde incluso los grandes jugadores del agro enfrentan dificultades insalvables. Mientras el gobierno persiste en su narrativa de éxito, las cifras y los hechos cuentan una historia distinta, una que exige un cambio de rumbo antes de que el colapso se generalice.

El “Rey de la Soja”, que alguna vez simbolizó el éxito del modelo exportador argentino, hoy lucha por sobrevivir en un contexto donde las políticas públicas brillan por su ausencia y los mercados especulativos dictan las reglas del juego. La pregunta que queda en el aire es cuánto tiempo más puede sostenerse un esquema que, en su afán por desmontar al Estado, ha dejado a la economía sin red de seguridad.

Fuente: En Orsai

 

Fuentes:

https://www.mendozapost.com/sociedad/pronostico-del-tiempo-13-de-enero-de-2025/

https://planbmisiones.com/2025/01/10/nota/rey-de-la-soja-o-rey-del-paga-dios-tras-default-ahora-a-los-grobo-le-rebotaron-15-cheques/

https://www.lanacion.com.ar/economia/campo/rechazan-cheques-de-los-grobo-por-unos-us2300-millones-y-hay-un-nuevo-embargo-de-216-millones-sobre-nid10012025/

https://www.cronista.com/finanzas-mercados/los-grobo-deben-mas-de-us-200-millones-y-un-cuarto-vence-en-el-primer-trimestre/

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