Unión tiene cinco partidos por delante antes de pensar en 2022, donde la dirigencia tendrá que resolver continuidades de jugadores. Mirá cada uno de los casos.

Unión trabaja mientras espera por Defensa y Justicia, otro aspirante a llegar a la Copa Sudamericana 2022, objetivo de mínima que se planteó la alineación de Gustavo Munúa. Si bien lo prioritario es poder terminar de la mejor manera un año difícil, también es verdad que después será poco el tiempo antes de volver a escena.

Y en este sentido, tal vez los desafíos puedan ser más importantes en caso de regresar a la arena internacional. Pero siempre con la resolución, por ejemplo, de nuevo contratos que entre el actual cuerpo técnico y dirigencia, tendrán que decidir los respectivos futuros.

-Sebastián Moyano: el golero es una de las figuras del equipo. Si bien en los últimos días el mendocino reconoció que ya hubo sondeos para su continuidad.

-Nicolás Peñailillo: el chileno llegó por expreso pedido de Azconzábal pero jamás se pudo afirmar en el equipo principal. Las lesiones lo fueron dejando al margen.

-Mauro Pittón: aquel volante central que descolló y por eso fue vendido a San Lorenzo jamás pudo reencontrarse con ese nivel. Sin lugar en el Ciclón, con poco protagonismo en Vélez y de retorno al Tate, su continuidad realmente es una incógnita.

-Enzo Roldán: el mediocampista que llegó de Boca se ganó un lugar y en cada presentación está mostrando sus cualidades que lo convierten en importante. Aquí primará seguramente la cintura política de los dirigentes para negociar con un grande.

-Marco Borgnino: jugó poco y en el camino fueron apareciendo opciones de jugadores de la cantera que no lo convierten en indispensable. Probablemente esté transitando los últimos días en la Avenida López y Planes.

-Cristian Insaurralde: una situación similar a la de Borgnino. En estos meses de trabajo, claramente Munúa sabrá diferenciar si desea sumar calidad y no quedarse con tanta cantidad, aprovechando que varios juveniles de Reserva piden pista.

-Juan Manuel García: Juanchón siempre rindió. Muchas veces debió pelear desde atrás pero en la relación costo-beneficio, o bien la estadística minutos jugados-goles convertidos, en ambas sale beneficiado como para hacer el esfuerzo y extender el vínculo.

-Fernando Márquez: todos pensaron en el regreso de un Cuqui goleador y el que se vio dentro de la cancha es un jugador más completo, tal vez con menos gol que se le reclama, pero generador de fútbol y buen trato de balón. El cierre del año lo encuentra en levantada.

-Nicolás Blandi: lo económico empezará a tener injerencia porque ya Colo Colo dejará de aportar lo suyo para solventar el sueldo del jugador. Su larga inactividad le jugó en contra y si los dirigentes optan por su continuidad, tendrá que hacer una muy buena pretemporada para estar a tono.

Con info de UNO Santa Fe

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