Este viernes juraron los nuevos concejales de la ciudad. La sesión, en la que reinó la tensión, estuvo marcada por el claro enfrentamiento político dentro del PJ. “Traidor”, le gritaron a Pignata desde las barras. Jaton, presente en el lguar, pidió calma.

Los pasillos del Concejo avisaron el jueves, un día antes a la jura de los nuevos concejales, que la sesión preparatoria del viernes -que define las nuevas autoridades del cuerpo  iba a ser tensa.

Lejos de tener tensión, la asunción de los nuevos legisladores de la ciudad estuvo más cerca de un escándalo que dejó en claro el quiebre dentro del partido Justicialista.

En el recinto reinaba el nerviosismo. Las militancias justicialista y radical le ponían color con sus cánticos y anticipaban desde el inicio lo que ponía en juego: la presidencia del cuerpo.

Sebastián Pignata, como presidente del Concejo, les tomó juramento a los nuevos ediles. El último en jurar fue Juan José Saleme, legislador justicialista que hasta minutos antes de asumir disputaba la presidencia del cuerpo.

“¿Quién viene?”, se le escuchó preguntar a Pignata. “Juanjo”, le responde el secretario administrativo, Fernando Molina. Saleme ya sabía lo que iba a suceder minutos después: Leandro González (Frente Progresista) iba a ser elegido por sus pares como nuevo presidente del Concejo.

El dato saliente y evidente fue que Saleme le negó el saludo a Sebastián Pignata. La mano extendida en el aire, del hasta hoy presidente del cuerpo, y la mirada fija del flamante edil a Pignata fue la postal del día en el recinto.

Inmediatamente, la militancia justicialista desde las barras comenzó a cantar: “Che Pignata, che Pignata, no te lo decimos más; si engañas al peronismo, que quilombo se va armar”. Los cánticos fueron interrumpidos por el mismo Pignata para darle continuidad a la sesión: “Bueno, muchas gracias. Gracias compañeros”.

“Pignata Traidor”

Segundos después, se procedió a la votación de nuevas autoridades del Concejo. González finalmente resultó electo presidente con el apoyo de Cambiemos y del Frente Progresista. Hubo cinco abstenciones, cuatro del justicalismo (entre ellos Pignata) y la del propio González.

Al grito de “hay que saltar, hay que saltar; ahora el Concejo es radical”, González se acercó hasta la presidencia para jurar como flamante presidente. El silencio volvió para apoderarse del recinto durante algunos segundos.

Tras el juramento y cumplidos los pasos protocolares, alguien desde las barras gritó “Pignata traidor”. Inmediatamente, el concejal levantó su mirada a las barras y avisó: “no, no te confundas”.

Presente en el lugar, a metros de Pignata se encontraba Emilio Jatón, futuro intendente de la ciudad a partir del 11 de diciembre. Como aquel que quiere trasladar calma, Jaton elevó su mano y le pidió tranquilidad a Pignata. “Mira para arriba”, se volvió a escuchar desde las barras; y quien miró esta vez a la militancia justicialista fue el futuro intendente.

Quien habló tras la polémica sesión fue Juan José Saleme. “¿Hay grieta en el PJ?”, le preguntaron. Sin dudarlo, respondió: “No, el bloque justicialista está unido. Lo conformamos tres personas: Jorgelina Mudallel, Federico Fulini y yo”.

“¿Y Sebastián Pignata?”, le repreguntaron. “No se, tiene otro bloque. No sabemos qué denominación tiene. El partido justicialista está representado por esos tres concejales, sin ninguna grieta”, definió.

“Lo dije antes de entrar, que no éramos parte del acuerdo. Hubo cambios de último momento con el acuerdo que se había charlado en parlamentaria y por eso quedó para otra sesión la elección del vicepresidente segundo. Modificaron el acuerdo que habían logrado en parlamentaria. Quedó vacante porque quien iba a hacer decidió no serlo (Pignata) y quedó abierto para seguir charlado y lograr nuevos acuerdos”.

Con información de Uno Santa Fe

Comenta sobre esta publicación