El Gobierno, mediante un decreto, dispuso diferir los pagos de los servicios de intereses y amortizaciones de capital de la deuda pública nacional instrumentada mediante títulos en dólares emitidos bajo ley de la República Argentina hasta el 31 de diciembre de 2020. Esto decía Fernanda Vallejos Presidenta de la Comisión de Finanzas:

“Después de cuatro años de brutal endeudamiento la insostenibilidad de la deuda argentina ya era indiscutible antes de la pandemia, por eso se trabajaba en la restauración de la sostenibilidad”.

“Hoy el escenario se complejizó de manera dramática y existe una circunstancia excepcional que no había sido prevista por nadie no es una cuestión de voluntad sino de posibilidad, no hay dólares suficientes para afrontar el pago de la deuda”.

“En este contexto de crisis hay razones de fuerza mayor y una prioridad impostergable que es el cuidado de la vida la salud de las personas. La suspensión de los pagos es una decisión necesaria y consistente con la realidad económica del país y de mundo, hoy por hoy se está discutiendo a escala global la imposibilidad de los países endeudados de seguir pagando cuando se está librando una batalla por la vida y en el día después de la recuperación económica de lo que se estima una de las peores depresiones de la historia del capitalismo”.