En su contra ya pesaban denuncias por violencia y robo, por parte de la propia hija de la víctima, es decir, su pareja.

El homicidio de Raymundo Barrionuevo, apuñalado en su casa durante un robo, conmueve a Catamarca, donde ya se realizaron varios pedidos de esclarecimiento del hecho. Pero el asesino estaba más cerca de lo pensado. Su yerno, Ezequiel “Peque” Condorí, es el único acusado de un caso con detalles escabrosos sobre la muerte del anciano.

Ese domingo 15 de enero se fue en taxi a un bar en donde pagó un asado y bebidas alcohólicas para un grupo de amigos. También aprovechó para pagar una deuda. Previamente, Condorí quedó grabado por una cámara de seguridad de un local comercial. Ingresó aproximadamente a las 7.30 y salió una hora más tarde de la casa del padre de su pareja, Graciela.

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