Viernes 15 de marzo, 13.17 horas, radio Lt10. Presentan al “humorista” que cuenta lo siguiente: “Una señora sube al colectivo con sus 8 hijos, logran sentarse 7 y ella. La madre ve al fondo a un señor dormido con las piernas muy abiertas ocupando dos asientos. Le dice al hijo que le pida al señor que cierre las piernas así él se podía sentar. Vuelve el hijo y le dice “el señor respondió que si vos hubieras cerrado las piernas hubiésemos entrado todos en el colectivo”.
Cuando un “humorista” hace un “chiste” de estas características desde los micrófonos de la radio de la Universidad Nacional del Litoral, radio pública, no podemos más que alarmarnos y repudiar enérgicamente su contenido. Repudio que, también hay que decirlo, nunca llegó por parte del conductor del programa, por lo menos públicamente, donde correspondía ya que el “chiste” fue hecho al aire.

Que las mujeres sean objeto de burla y desprecio por parte de algunos sectores no sorprende, lamentablemente.

Que las mujeres y su maternidad sean cuestionadas y descaradamente señaladas, tampoco.

Que la sospecha recaiga sobre las mujeres de los sectores más vulnerables, tampoco.

Hoy realicé la denuncia correspondiente en la Defensoría del Público bajo la carátula “violencia mediática”. Violencia que recuerda a la ejercida por Ernesto Sanz y su “la plata de la AUH se va por la canaleta del juego y de la droga”. Violencia que recuerda a la ejercida por el entonces candidato del PRO, Miguel del Sel, casualmente también “humorista”, cuando afirmó que las mujeres se embarazan para cobrar la asignación.

Basta de violencia mediática.
Basta de discriminación y odio de clase.
Basta de misoginia en los medios de comunicación.

Fuente:  Facebook de Mariana Steckler

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