La preocupación creció entre los vecinos de la zona por el intenso movimiento de personas que presentó el lugar en los últimos meses. Fogatas, asados, música, suciedad, deportes acuáticos y poco control.

Los vecinos de la zona de Villa California, observan con mucha preocupación desde hace ya un tiempo, un crecimiento muy marcado de muchedumbre en un sector que se conformó de forma natural producto de la bajante del Paraná, y que hoy es un área de descontrol. Una laguna artificial, al fondo de calle Del Sol, cruzando el terraplén de defensa, donde proliferaron los encuentros sociales, reuniones de jóvenes, asados, fogatas, deportes acuáticos y mucha suciedad , Héctor Duarte, presidente de la vecinal de Villa California, mostró su intranquilidad por una zona donde cada vez se observan más vehículos circulando y que no está habilitado.

“Cada vez se observa mayor movimiento en este espejo de agua formado por el dragado que se realizó en el lecho de la laguna cuando se construyó la defensa. Ahora, producto del bajo nivel del río, se forman lagos artificiales, visualmente agradables, pero muy peligrosos por no tener referencia de la profundidad”, resaltó Duarte y continuó: “El lugar se convirtió en una especie de playa artificial, con mucho terreno para actividades recreativas, sin ningún tipo de habilitación. Vemos a diario familias con chicos pescando, asados y fogones de grupo de jóvenes, deportes acuáticos y sobre todo, mucha suciedad. El descontrol se apoderó del lugar y eso nos preocupa”.

Según resaltaron desde la vecinal de Villa California, “la Municipalidad de Rincón intentó sellar el acceso a la defensa con barreras y montículos de tierra, pero para nada pudo impedir que la gente la transite a diario con vehículos”.

La presencia de muchos pastizales secos es una intranquilidad constante, porque la gente se acostumbró a prender fuegos y no es atenta al control una vez que se retira del lugar. Además, observamos que cada vez hay más desechos en ese lugar y con las crecientes todo termina en la laguna”, subrayó el Duarte.

En definitiva, las noticias que llegaron a los vecinos desde la costa contraria a Villa California, en Monte Vera, con el descontrol que se observó en los últimos meses con el “Chaquito”, puso en alerta a los referentes del lugar, los cuales denunciaron una situación que, según relataron, “todavía las autoridades están a tiempo de controlar y erradicar”.

Con información UNO Santa Fe