Diputados, oficialistas y de la oposición, se expresaron sobre el alejamiento del ministro de Seguridad, en medio de una violencia en crecimiento en las grandes ciudades, sobre todo Rosario.

Este miércoles, el gobernador tomará juramento al comisaría general Rubén Rimoldi en reemplazo de Lagna, y hará lo propio con Miguel Ángel Oliva, quien ocupará el lugar de Chimenti.

Lionela Cattalini, diputada provincial e integrante de la Comisión de Seguridad Pública, y quien encabezó el pedido de interpelación a Lagna para que informe sobre la situación de la seguridad en la provincia, aseguró  que están “muy preocupados por lo que está pasando en la provincia, sobre todo en las principales ciudades viven un momento de inseguridad agobiante, donde nos estamos acostumbrando a vivir entre balaceras, amenazas, extorsiones, homicidios y una violencia incesante”.

Sin embargo, lo que más les indigna es “la improvisación de un gobierno, cuyo primer marca es esa, llegó a ganar las elecciones con una falsa promesa, y que no había ni plan ni equipo, ni voluntad de política para lograr esa efectiva paz y orden”.

“Hay una desconducción política muy importante que se traduce en una desconducción policial para abajo” concluyó.

En el caso de Lagna, le adjudica la salida al “recrudecimiento de los homicidios en la ciudad de Rosario”.

La diputada provincial Betina Florito también manifestó su “preocupación porque realmente la política quede subordinada a un policía”.

“Nos preocupa, pasamos de un ministro como Sain con su impronta, a un Lagna moderado pero de la política, y ahora entregar la conducción de las fuerzas policiales a un retirado” destacó.

“En este gobierno no hay gestión, nunca lo hubo (…) la política pasa por otro lado, sabemos lo que ha pasado cuando las fuerzas policiales tuvieron su poder. Claramente, Omar Perotti no tiene ni paz ni orden” concluyó.

Fuente:LT10