Fue en un partido de fútbol en Laguna Paiva. El Pipi A. de 32 años, llegó disparando con armas de fuego. Los espectadores lo molieron a trompadas y lo mandaron al Cullen, donde además está detenido

El domingo a las 19, durante un partido de fútbol que se disputaba en el predio denominado El Buzón de la ciudad de Laguna Paiva, un hombre llegó a los tiros con un arma de fuego en cada mano.

Los espectadores, los jugadores del partido y el referí, se desbandaron cuando escucharon los primeros tiros, corriendo en cualquier dirección para evitar ser heridos.

Parte de los espectadores la emprendieron a trompadas y patadas contra el agresor, que quedó tendido en el piso. Luego, cuando llamaron al 911, lo llevaron en un patrullero al Samco paivense, y por la gravedad del cuadro lo trasladaron al Hospital Cullen, adonde quedó internado en la unidad de terapia intensiva.

La fiscal de Homicidios del MPA, Cristina Ferraro ordenó que M. A. A. de 32 años, apodado Pipi, continuara privado de su libertad y en carácter de incomunicado por el delito de “abuso de armas”.

Antecedentes criminales del Pipi

La investigación constató que M. A. A. de 32 años, conocido por el apodo de Pipi, cuenta con los siguientes antecedentes penales: tentativa de homicidio del 21 de julio, el 7 de agosto robo agravado por la presencia de un menor, 24 de octubre por amenazas calificadas.

Informaron la novedad a la jefatura de la Unidad Regional I La Capital y estos hicieron lo propio con la fiscal de la unidad especial de homicidios del Ministerio Público de la Acusación, Cristina Ferraro, que ordenó que al hombre se lo identifique y procese por el delito de abuso de armas, que continúe privado de su libertad y en carácter de incomunicado.

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