Javier Martin, titular de Unión Industrial Santa Fe.

“Vemos un enfriamiento en la demanda y en algunos casos una caída importante, como en el rubro maquinarias agrícolas, y ya se está observando también en el rubro construcción, que era uno de los rubros que venía empujando, un parate significativo que va a impactar en los meses que vienen. Lo del sector agropecuario es consecuencia de la magra cosecha que hubo por la sequía y en el tema de la construcción, sobre todo lo que es obra pública nacional, hay un reacomodamiento de pagos, y hay obras en suspenso a raíz de los planes del gobierno para reducir el déficit fiscal. Hay alarma en las empresas constructoras porque prevén una reducción en los niveles de actividad.

Nosotros no tenemos un detalle de qué es lo que se está firmando (con el FMI), pero no hemos visto ninguna medida de reactivación del aparato productivo que es lo que nos interesa a nosotros. Es difícil que se reactive si las tarifas van a continuar aumentando, si la inflación continúa en un ritmo que es preocupante, y si vamos a tener tasas de interés del 40% para financiar el capital de trabajo.  No creemos que el nivel de actividad suba y en algunas líneas va a descender. Con una inflación que todavía no está controlada y una devaluación que se produjo de forma súbita que produjo aumentos de precios, todo eso conforma un cóctel complicado para una industria, sobre todo la que depende del mercado local, que  venía con un nivel de demanda que no se había reactivado.

Tenemos un estudio que se hace en conjunto con el Ministerio de la Producción de Santa Fe que arroja resultados preocupantes, frente a una demanda interna restringida o declinante hemos visto aumentos de importación significativos. Rubros como calzado, indumentaria, maquinaria agrícola, en algunos casos han aumentado un 40%, 50% en volumen las importaciones, frente a una demanda estable o declinante.

Hoy la industria nacional está utilizando entre el 60% y el 62% de la capacidad instalada, lo que es bajo, estamos con una capacidad ociosa importante.

Según datos del Ministerio de Trabajo en los últimos dos años la industria a nivel nacional perdió 68.000 puestos de trabajo.

El escenario más probable es que haya actividades que tengan un remanente de crecimiento como la producción bobina motorizada por el aumento de las exportaciones, pero las producciones vinculadas con el mercado interno van a seguir sufriendo con la inflación, el aumento de las tarifas, de los combustibles, que termina impactando en la cadena de los costos.

La industria ha venido perdiendo rentabilidad de forma significativa y las pymes aguantan lo que pueden y después tienen que cerrar, primero reducen todos los costos, en general en la pyme el despido es la última opción.

Lo que nosotros entendemos es que tiene que haber un plan, un modelo diferente que promueva la producción nacional, que promueva el empleo nacional porque eso es lo que se pelea hoy en todo el mundo.

El pico de actividad en los últimos 10, 15 años fuel el 2010-2012, después bajó un poquito el crecimiento y según la UIA  siguió creciendo hasta el último trimestre del 2013.”

Escuchá la entrevista con el titular de Unión Industrial Santa Fe: