Organizaciones y vecinos ubicados en la Vuelta del Paraguayo reclaman por una mayor intervención municipal en una zona con peligro de inundaciones. Anahí Acebal, integrante del Proyecto La Revuelta, charló con Fm Chalet acerca de la situación actual del barrio.

Para los vecinos de la zona, el conflicto comenzó con las inundaciones del año pasado, cuando el Municipio colocó un cerco perimetral alrededor de aquellos que estaban evacuados, que no permitía el ingreso al barrio de los trabajadores de La Revuelta, e incluso de los mismos vecinos. Al respecto, Anahí explicó:

“Nosotros presentamos un recurso de amparo porque no permitían el ingreso y egreso de los trabajadores del proyecto, así como también restringían las visitas de los familiares y determinaban horarios, con una guardia de seguridad constante de la GSI”.

En el recurso también incluyeron una serie de irregularidades que se dieron en el momento de la evacuación. La jueza a cargo decidió en diciembre del año pasado convocar a los vecinos de la zona y a los representantes municipales, y generar una instancia de diálogo, para resolver cuestiones a futuros relacionadas con posibles inundaciones. Sin embargo, dicha reunión nunca pudo concretarse:

“Nosotros lo que estamos denunciando es que esa reunión debía darse en un plazo de 60 días, nunca se cumplió. De hecho el municipio apeló a la decisión de la jueza de ese juzgado, fue negada esa apelación y volvió a apelar frente a la cámara de operaciones, diciendo que ellos se habían reunido pertinentemente en los momentos de pensar los planes de contingencia, pero los vecinos niegan tal cosa”.

Anahí además explico que en esa zona, hablar de “contingencias” cuando se trata del tema de las inundaciones es erróneo, puesto que es una realidad con la que los vecinos deben convivir diariamente, y que requiere de especial atención. En la actualidad, el barrio no cuenta con la inversión en obras necesaria, y las iniciativas surgen usualmente de los propios vecinos, y se desprenden de esos recursos.

“El barrio sigue en las mismas condiciones que años anteriores, no se han realizado ningún tipo de obras para apalear esta cuestión cotidiana de la inundación. De hecho ahora, con una crecida mínima, ha empezado a ingresar el agua cortando los caminos y los accesos. Lo que si cambia es que ahora las familias mejoran sus viviendas, las adaptan más, y es a menos altura que se inundan mucho. Al respecto también hemos presentado un proyecto de resolución en donde se exige la realización de obras que son mínimas y prioritarias, como al pavimentación del camino de acceso o el alcantarillado, obras mínimas que permitirían paliar esta situación”.

Para Anahí, el desinterés de las autoridades municipales proviene de una escala de prioridades que no los incluye.

“Claramente el municipio está pensando en otros intereses y buscando otros réditos. El lugar sabemos que es muy cotizado por la cuestión de la valoración que tiene todo lo relacionado al turismo de isla. Por ejemplo, veíamos como con la reubicación de los boliches en la zona, para poner los servicios básicos como alumbrado, agua o cloacas se gasta lo mismo que valdría acondicionar el camino para evitar que más de 150 familias puedan no inundarse”.

Los vecinos volverán a presentar una nota, exigiendo la realización de la reunión con las autoridades municipales previamente acordada.