Tras haber obtenido el beneficio de la prisión preventiva domiciliaria, el abogado defensor del exfiscal regional Patricio Serjal, Hugo Lima, aseguró que la vida de su defendido “corre peligro” a raíz del deteriorado estado de salud mental que padece desde que comenzó su derrotero judicial a partir de la causa de juego clandestino. También insistió en que no hay pruebas concretas para involucrarlo y que su detención es “política”.

El juez Juan Carlos Leiva le otorgó la morigeración de la prisión preventiva al exfiscal regional del Ministerio Público de la Acusación el 25 de febrero pasado tras la evaluación realizada por una junta médica.

“Cumple la prisión domiciliaria en un departamento calle Zeballos en Rosario, siguiendo un tratamiento psiquiátrico-psicológico ordenado por el juez Leiva”, confirmó y agregó que “es tan serio el tema que su vida corría peligro, por eso está bajo la guarda del juzgado porque podría autoflagelarse” a partir de su cuadro psiquiátrico que padece Serjal.

Lima aseguró que en el lapso que llega el proceso judicial, Serjal “bajó 26 kilos por el problema psiquiátrico que padece, a tal punto que fue visto por una junta médica, a partir de la audiencia donde se pidió una morigeración de preventiva”, y afirmó: “Todos coincidieron que necesitaba arresto domiciliario”.

Respecto a la causa, Lima sostuvo que “de los elementos objetivos que hay en la causa no existen pruebas para determinar que él se enriqueció a costa de una coima. De hecho tuvo que alquilar un departamento porque no es propietario”.

En ese sentido, argumentó: “Es una persona que percibía no menos de $500 mil por el cargo que ocupaba, sumado a que es profesor de la UNR y la UCA. Así y todo no se ha determinado que haya enriquecimiento ilícito”.

“Son causas políticas muy difíciles de defender. Es como atacar los molinos de viento que surgen como chivo expiatorio. No hay nada para incriminarlo porque las únicas pruebas que hay en su contra son las declaraciones de (el empresario del juego Leonardo) Peiti, el rey del juego clandestino de la zona de Rosario. No hay absolutamente nada, sólo conjeturas y lo que dijo (el fiscal destituido, Gustavo) Ponce Asahad”, agregó.

Por otra parte, consideró que “fue un error de decisión” el hecho de renunciar al cargo de fiscal regional porque, a su entender, “podría haberse amparado en los fueros como lo hizo el senador (Armando) Traferri”.

“Sucedió que él se sintió inocente y por eso tomó esa decisión”, concluyó.

Con información de Santa Fe 24hs

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