En cada compra los santafesinos se asombran de la suba de precios. Cambian sus hábitos de consumo y compran lo que pueden. Los lácteos además en faltante.

Por Valentina Fassi

El bolsillo de los santafesinos está cada vez más golpeado. Semana a semana se registran aumentos en los productos de la canasta básica familiar. Según el Indec, febrero dejó un 3,8% de inflación, sumando ya en los dos primeros meses del año un 6,5%, y alcanzando el 51,3% en los últimos 12 meses. Los datos duros se sienten en cada mandado. El pollo, la carne y los lácteos son los productos que compra a compra vienen marcando esta constante: el aumento.

Costo del pollo

“El pollo aumentó un 60% en el último mes y medio. Y cada dos días sube el cajón un poco más. Todos los días tenemos que ajustar los precios de góndola”, dijo José Luis Pérez, propietario de Todo Pollos, Cosas Ricas del Mercado Norte.

Según indicó el comerciante, el cajón de pollo a fin de enero estaba a $970 aproximadamente, y hoy cuesta $1.720.  Esto hace que los precios de los productos a la venta aumenten semana a semana. “Hace un mes el kilo de milanesas de pollo estaba en $190 y hoy a $250. El kilo de pollo estaba a 85 y hoy a 115 en mostrador”, detalló.

La suba de precios lleva hoy a los consumidores a cambiar sus hábitos de compra, pero aseguran en el rubro que el pollo se sigue vendiendo porque “sigue siendo igualmente más barato que la carne” (que este año tuvo un importante incremento).

“Ahora la gente elige comprar el pollo entero y lo elabora. Antes vendíamos más milanesas y ahora se llevan el pollo por kilo. Pero se sigue vendiendo porque la carne está a 320 el kilo de pulpa, y el pollo sigue teniendo mejor precio”, señaló Pérez.

Carne

La carne fue el gran golpe al bolsillo en el inicio del año, pero los comerciantes aseguran que en las últimas dos semanas el precio se estabilizó. Los comerciantes hablan de un aumento de precios del 40% y una baja del consumo de un 20%. 

“El aumento real del costo de la materia prima de carne para nosotros fue de un 40% desde el 31 de diciembre. Pero no podemos trasladar todo al mostrador”, comentó Nicolás, dueño de Establecimiento La Gallareta, que se encuentra en el Mercado Norte.

En tanto señaló que los aumentos fuertes fueron en el inicio del año y se registraron semana a semana; “y ahora hace tres semanas, desde mediados de febrero, que no registra aumentos”, contó.

En diciembre el kilo de pulpa de carne estaba alrededor de $240 y hoy ya está en $310. Y un asado para cuatro personas, calculando un total de dos kilos, a principio de año costaba unos $400 y hoy ronda los $650.

Denuncian que estos aumentos provocaron una baja del consumo del “20%”. “Bajó mucho la venta. La calidad es la misma, lo que subió fue el precio. Ahora eligen un poco más al comprar. La gente cuenta los bifes o lleva cortes más económicos que antes no salían como la aguja, el brazuelo, la picada común y la marucha”, comentó Nicolás.

Lácteos: con aumentos y faltante

En las góndolas de supermercados de la ciudad se puede notar cómo día los precios de los lácteos van aumentando, pero también se encuentran espacios vacíos donde deberían exhibirse estos productos. La inflación y la devaluación de estos meses son los responsables del precio; sumado a la situación de desabastecimiento producto de las cuestiones climáticas en la Cuenca Lechera del país. Desde la Industria advierten sobre la situación.

La leche en la última semana aumentó alrededor de $7 promedio por litro y hoy los valores rondan entre los $38 y los $50, dependiendo de las marcas. Los repositorios de mercadería confirman estos datos y señalan que “todos los días hay un aumento nuevo”.  En tanto, la faltante en la ciudad se nota en las primeras marcas, principalmente; aunque la baja en las ventas disimulan la situación.

Los quesos presentan en lo que va del año un aumento promedio de más del 40%, según indican comerciantes de rubro. Además sufrieron el desabastecimiento, que en la última semana comenzó a a estabilizarse. “Hubo bastante faltante después de las lluvias y ahí los precios aumentaron mucho. Hubo primero un incremento fácil del 20% y todas las semanas aumentan entre un 5 y 10%. Hace 10 días se normalizaron las entregas, pero los aumentos son semana a semana”, indicó el encargado de un reconocido comercio de este producto.

Además indicó que entre las primeras marcas y las económicas los precios hoy son “similares y elevados”. Otra vez el precio hace que los santafesinos tengan que ajustar el bolsillo y las ventas están en baja. “El que se llevaba una horma, ahora se lleva medio kilo; el que se llevaba medio ahora cuarto y el que llevaba cuarto pide 20 o 30 pesos”, ejemplificó el comerciante aunque dijo que se sigue vendiendo, pero reconoció una baja en las ventas que en los últimos dos años acumuló un 50%.

 

Comenta sobre esta publicación