Sus “historias innecesarias” van de los Peaky Blinders al Robo del Siglo, pasando por marihuana, consumo irónico y bidetazos.

YouTube es el gran archivador audiovisual de la cultura pop. Cambió la forma de ver lo que pasa y pasó en el mundo en poco más de un siglo, como un baúl universal de memorias fílmicas inagotable y, casi siempre, ingobernable. Ahí, donde se guardan las historias, Damián Kuc las cuenta. Desde su canal personal, recorta un objetivo para narrar en off de forma simple y cómplice, apoyado en material audiovisual de la web. Así propone alguna de tantas “historias innecesarias” .

Con vestimenta casual detrás de un escritorio, o en pijama delante de un croma que proyecta un ambiente lúgubre, pero siempre desde la comodidad de su casa en Resistencia, Chaco, le dedicó el más reciente de sus 24 años casi exclusivamente a contar historias por YouTube. “Es una plataforma a la que, para que te vaya bien, tenés que meterle un montón. Así como es bueno, el algoritmo puede ser muy cruel si no estás con un video semanal o cierta constancia“, explica Kuc.

El Ital Park. La primera visita de Guns N’ Roses al país. Pumper Nic. Noticias que dieron la vuelta al mundo. Crímenes famosos. Terraplanismo, anti-vacunas y consumo irónico. Mitos urbanos, desórdenes, tradiciones orales y fenómenos pop, muchos de ellos heredados de juventudes anteriores, pueblan el canal de Damián Kuc, que prácticamente en un suspiro logró lo que pocos: crear un fenómeno viral sin poner un pie fuera de su casa.

El archivo es organizado y empaquetado para su ágil y fácil consumo, lo que permite mirar y pasar rápido a otra cosa, o seguir con más historias. La distancia entre narrador y espectador suele ser la mínima: “El plato fuerte es el video largo, que sale cada domingo, y tengo una semana entera para armarlo. Me lo tomo bien tranquilo para no tirar fruta. Hay veces que no sé qué tema voy a tocar hasta el jueves. Cuando defino el tema, es cuestión de buscar”.

Views, cuarentena e historia argentina

Con su canal ya convertido en un activo importante para la plataforma y el algoritmo corriendo la voz a toda máquina, esta semana Damián celebró haber llegado al medio millón de suscriptores con un nuevo pijama, un nuevo fondo y un video de 44 minutos acerca del Clan Puccio . Apenas unos días después, ya tiene arriba de 580 mil.

Como youtuber de tiempo completo, reparte presencia entre el canal personal, una participación por mes en el portal FiloNews, una quincenal en el programa de radio Últimos Cartuchos, y alguna incursión en History Channel, con las adaptaciones de cada caso pero siempre con el mismo concepto.

¿Cómo se explica esta explosión de visitas durante la cuarentena? ¿La gente tiene más ganas de escuchar historias?

–Por lo que veo en los comentarios, creo que mis videos tocan los temas de una manera distinta. Lo mío no es innovador, es una voz en off y archivo; otros hacen lo mismo desde hace años. Pero yo creo un contenido rápido, algo que yo miraría. No soy muy de los videos largos, me distraigo muy fácil. Trato de resumir lo más que puedo, no me gusta meter rellenos ni mucho misterio.

¿Tenés en claro cuál es tu público?

–Creo que abarqué un público que quizá no tenía contenido para ver. Me di cuenta ahora de que chicos muy chicos me mandan mensajes o fotos mirando los videos con los viejos. Hoy un flaco me contó en Twitter que es la primera vez que a su papá le gusta algo de YouTube que él mira. Al ser un contenido tan amplio, abarca mucho público. Creo que por eso está teniendo tanto éxito.

Mirás con frecuencia los números de las redes. ¿Qué impacta más en las franjas más jóvenes?

Lo paranormal y lo “conspiranoico” llaman la atención poderosamente, sobre todo en esas franjas. No los pienso hacer porque no me interesan, así que pierdo por ese lado. En base a lo que hago, llama más la atención cuando hay un vínculo entre el caso real y series o películas. Son las formas más entretenidas que tienen de conocer los casos. Si después metés YouTube en el medio, les interesa más. Lo vi en historias como la de El Ángel  o la de los Peaky Blinders . Al principio me costó que la gente más chica se sintiera atraída por las historias que me gusta contar. No sabía si un pibe de 16 años iba a querer saber qué le pasó al hijo de Menem , pero a la larga vi que sí. Recibo mensajes de padres que me dicen que fue la manera en que sus hijos se interesaran en la historia argentina.

El boom de la información satélite

La primera gran trepada de visitas la generó efectivamente hace seis meses la historia del asalto al Banco Río (el llamado “Robo del Siglo”), publicada poco antes del estreno de la película, y que ya fue visto por casi un millón y medio de personas. El estallido definitivo se dio ya en plena pandemia, al recibir más de 400 mil suscripciones en sólo 3 meses, y consagrarse como uno de los fenómenos virales del momento. El de la verdad sobre Carlos Robledo Puch (El Ángel) es el video más visto del canal, con más de 2 millones de reproducciones.

“Cuando recién empecé a crear contenido era algo más local, mi público era de Chaco. Quizás iba al shopping y alguien me pedía una foto o me decía que le gustaban los videos. Eso era en diciembre, cuando tenía 15 mil seguidores. Ahora en Instagram tengo más de 230 mil. YouTube ni hablar: prácticamente ni lo usaba cuando no había pandemia”, recuerda.

Damián sólo entraba a YouTube para escuchar música. Prefería Instagram, donde podía difundir los conciertos del fin de semana en su ciudad, sus shows de stand up o las gracias de su perra Minerva. Las primeras Historias innecesarias surgieron en esa red social, donde resumía en menos de dos minutos la cruzada de la Iglesia católica contra el bidet o el entretelón romántico de las galletitas Tita y Rhodesia . Hasta que, sin siquiera conocerse mutuamente, Paulina Cocina le escribió para recomendarle que volcara ese contenido en YouTube.

¿Tenés alguna metodología de trabajo?

–La empecé a implementar hace poco. A mayor público, más uno se preocupa por hacer contenido de calidad. Definido el tema, es cuestión de buscar y buscar. Recopilo la mayor cantidad de links posible, saco lo que tienen en común esas fuentes y lo vuelco en un Word. Con la columna vertebral, empiezo a buscar esa información satélite medio falopa, que es la que más me gusta a mí. Lo que no está en ningún lado, lo que alguien comentó. Intento chequear, y la voy metiendo. La parte más densa es la de editar, pero es la que más me divierte.

¿Qué canales tomaste de referencia, una vez inmerso en la plataforma?

–Mi último recuerdo de YouTube es que era toda gente mostrando cómo jugaba jueguitos. No buscaba demasiado, miraba youtubers extranjeros ligados a plantas y cosas similares. Cuando empecé con esto, encontré de todo. Lo que hace Ramita (de Bajoneando Por Hay) me parece fantástico, el nivel de los videos es una locura. Otro que me gusta mucho es Tomás García , que no se autopercibe como youtuber, aunque ya le dije que lo es. También lo que está haciendo Radagast con la carpintería ; no entiendo nada del tema, pero me divierte mucho verlo. Es la magia de YouTube: te hacen un lindo videíto y te lo comés entero.

¿Cuál es tu video favorito del canal?

Me gusta mucho el de Charles Manson . Era la primera vez que hacía un video tan largo, y quedó como un mini documental. Otro de mis preferidos es el de la marihuana , porque empecé a ver que pasaba algo en la gente. Alguien me dijo que le había mostrado el video a su abuela, que ahora no tenía problema con que plantara en casa. Otro que lo vio con los papás y abrieron la cabeza, recapacitaron sobre el tema. Por primera vez, veía que se producía algo más que un like o un comentario.

Con información de Página 12

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