El Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales pasa por el peor momento en décadas. Intervenido por el gobierno de Macri, con todos los pagos a la industria congelados y bajo la lupa del ministerio de Modernización, vuelve a poner en riesgo la continuidad del Cine Nacional. Hay varios empleados cesanteados y el conjunto de los trabajadores está en estado de alerta por nuevos despidos.
Con Sabor a Barrio entrevistó a Camilo Biurra.
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