La fábrica de autopartes Lear suspendió al 40 por ciento de los operarios de su planta en Escobar, en la provincia de Buenos Aires, y los trabajadores temen que se inicie una nueva ronda de despidos por la caída de las compras de las automotrices. Las suspensiones son consecuencia directa de la baja de la demanda del Grupo PSA (Peugeot-Citröen), que a su vez paralizó la producción de la planta que tiene en El Palomar hasta mediados de abril. La crisis de la industria automotriz está lejos de terminar, ya que a la caída en torno al 50 por ciento de las ventas en el mercado interno se suma una desaceleración de los envíos a Brasil, hacia donde se destinan el grueso de las exportaciones del sector.

Lear es una autopartista de capitales estadounidenses con tres plantas en la Argentina, dos en Buenos Aires (Escobar y Pacheco) y una en Córdoba. La paralización de actividades en PSA, con la suspensión de mil operarios, repercutió en la actividad de su proveedora, que la abastece de asientos y fundas. Los afectados en Lear son 50 trabajadores, quienes permanecerán suspendidos hasta el 12 de abril y cobrarán el 75 por ciento del salario.

Los trabajadores de la empresa se muestran preocupados porque temen que después del plazo de suspensiones la firma decida aplicar despidos si las perspectivas de producción no mejoran.

Fuente: Página 12

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