La actual vice gobernadora y candidata testimonial a Diputada Nacional por la provincia de Santa Fe no se sabe en que tono chicanear si en su rol de integrante del poder ejecutivo provincial o en su rol de candidata del PRO .
Lo único que se puede reconocer a una candidata del PRO aliada a la LLA o al Socialismo, según convenga en cada coyuntura, es apelar a confrontar con el kirchnerismo pues cuando no existen logros para mostrar ni ideas que llevarán al Congreso Nacional apelan a la chicana barata y gastada de hablar al núcleo duro del PRO que quizás sea solo ese escaso 29% del electorado que siempre ha demostrado en su ADN el antiperonismo y gorilismo.
El relato electoralista apunta a retener el núcleo duro del conservadurismo santafesino que se reconoce antiperonista y sobre todo antikirchnerista. En otro relato gastado dijo : “Soy antikirchnerista de pura cepa” y se le nota demasiado, también afirmó que:”El kirchnerismo piensa que a la inseguridad no se la combate”, olvidando que la inseguridad tiene vertientes de desiguladad social y narcotráfico cuestión que representantes de LLA pueden hablar muy bien, lease Espert y Villaverde, incluyendo a la actual Ministra de Seguridad Nacional Patricia Bulrich.
Anticipó que si dentro del Congreso las fuerzas estuvieran equilibradas, no dudaría en acompañar a Milei en las reformas laborales, previsionales y tributarias que ordena el FMI y el Tesoro de Estados Unidos. Básicamente nuevamente votar a favor del oficialismo libertario cipayo entregador, mas claro échale agua, acompañaría a cualquier fuerza que sea antikirchnerista.
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