El empresario se sumó a la guerra de Milei contra los “gerentes de la pobreza”. Nuevos clientes para su negocio y el problema de la garantía de los depósitos.
Marcos Galperin , fundador de Mercado Libre, es uno de los primeros integrantes del Círculo Rojo que apoyó al presidente Javier Milei. Ahora volvió a marcar su militancia libertaria anti Estado y festejó que el Gobierno le permita a personas beneficiadas con programas sociales cobrar a través de su billetera virtual: Mercado Pago.
Beneficios según la era política
En 2011, cuando se encaminaba a la reelección, CFK amplió el régimen hasta 2019 y dispuso que se pudieran aplicar exenciones impositivas a las Ganancias provenientes de fuente extranjera. A MeLi le recortaron parte de los beneficios fiscales relacionados con los trabajadores de logística, que nada tenían que ver con la industria del software.
Con la llegada de Alberto Fernández, Galperin volvió a Uruguay, según argumentó, “cansado de la alta presión tributaria y las excesivas regulaciones”. La administración albertista modernizó la Ley de Promoción de la Economía del Conocimiento y MeLi continuó aplicando para eximirse de impuestos. Sólo entre 2022 y 2023, según sus propios balances, dejó de pagar u$s142 millones, un 12% de las ganancias que reportó la empresa en ese período.
Javier Milei le acerca clientes
Galperin creó la plataforma de comercio electrónico más importante de Latinoamérica. Luego le adosó Mercado Pago, su línea de servicios financieros y de pagos que actualmente es el negocio más rentable de Mercado Libre. Este lunes, a través de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), Milei le acercó nuevos clientes: 5,5 millones de personas beneficiarias de asignaciones sociales a quienes la administración libertaria les ofrece ser clientes de Mercado Pago.
Es la ejecución de un acuerdo firmado por Macri y Galperin en 2019. “Lo voy a hacer gratis por el placer de cortarle el curro a todos los gerentes cooperativistas de la pobreza y los piquetes”, afirmó el empresario. El sistema es que ya es gratis, ya que se cobra por Banco Nación u otros bancos sin más intermediarios que una tarjeta de débito.
Ahora las billeteras virtuales podrán recibir esos fondos de parte del Estado con el riesgo que implica, porque las fintech no se consideran entidades bancarias respaldadas por el Banco Central. Los depósitos instalados ahí generan rendimientos y es un incentivo para quienes tienen su dinero en esas cuestas, aunque no tienen el reaseguro oficial. También es un negocio financiero para las empresas, dado que recibirán los fondos públicos 15 días antes de acreditárselo a las personas beneficiarias.
Derechos laborales moderados
El intervencionismo y las regulaciones que Galperin asocia con el peronismo, al que bautizó “Peronia a la Argentina”, hicieron que Macri, 20 días antes de irse, le homologue el convenio laboral exclusivo con el sindicato de Carga y Descarga, que conduce Daniel Vila.
Así consiguió un Convenio Colectivo propio para las casi 2.000 personas que trabajan en el depósito que MeLi Log SA tiene en el partido bonaerense de La Matanza Una reforma laboral fáctica que eludió al Sindicato de Camioneros, que todavía reclama judicialmente el encuadre legal.
Analistas del derecho laboral coinciden en que ese convenio instala el banco de horas, establece turnos rotativos, polivalencia para eliminar las categorías entre quienes trabajan y no contempla horas extras. Un modelo parecido al que firmó el sindicato de mecánicos SMATA con Toyota, en una escala salarial más baja.
Galperin también se peleó con Sergio Palazzo, de La Bancaria, por la afiliación de quienes trabajan en Mercado Pago. Otra cara tiene MeLi para contratar profesionales informáticos, donde el mercado es mucho más exigente y se pagan los salarios más altos; aunque tampoco les paga horas extra.
Fuente: Letra P
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