Tren Urbano dialogó con Ramón Romero, representante de los más de 30.000 trabajadores ladrilleros que hay en la provincia de Santa Fe.

Según datos de diciembre, la construcción cayó 22,5%. “Todo sabemos que cuando la construcción se empieza a mover se empieza a mover el motor del país. Y nosotros somos el primer engranaje, somos los fabricantes de esos ladrillos con los que se construyen las casas y los cimientos de un país”, expresó Romero.

“Calculamos más de un 30% la caída de la venta de ladrillos en la provincia”. “Aquellos hornos que tenían siete u ocho trabajadores hoy se quedan con dos o tres”, explicó. “Usualmente los ladrilleros cuando no conseguían trabajo se terminaban volcando a la construcción, y es donde tenemos el parate ahora tambien. Hoy encontramos que esos compañeros andan deambulando”, sostuvo.

“En avellaneda tenemos una fábrica con 58 compañeros donde los aumentos de la leña y los servicios hacen peligrar las fuentes de trabajo, porque el dueño de la fábrica no puede solventar los gastos más allá de pagar los sueldos y las cargas sociales”, explicó.

Escuchá la entrevista con Ramón Romero: