El entrenador sabalero admitió en las últimas horas que le solicitó dos y en algunos casos tres jugadores por puesto, incluyendo el golero. ¿Se va Burián?
El plantel de Colón ya está de vacaciones. La necesidad de un lavado de cabeza y el cambio de chip era algo que se venía pidiendo a gritos después de afrontar una pobre campaña en la Superliga. Fue muy satisfactorio terminar el semestre clasificando a los octavos de final de la Copa Sudamericana.
El propio entrenador sabalero, Pablo Lavallén, admitió que lo más importante no era el funcionamiento sino el resultado. Más que nada para despedirse de la actividad oficial con una sonrisa. Se cumplió holgadamente el objetivo y por eso se es más optimista pensando en lo que será el inicio de la nueva temporada.
Antes de dejar Santa Fe para descansar con su familia, el DT le encargó algunos pedidos a la dirigencia: las renovaciones de Matías Fritzler, Emmanuel Olivera y Damián Schmidt. Pero también el arribo de varios refuerzos. Al parecer, ya se avanzó en esto, porque en la semana se terminaría de cerrar el arribo del volante Rodrigo Aliendro de Atlético Tucumán. Si bien está casi todo listo, restan detalles que deben cumplirse y por eso, hasta que no esté la firma, no hay que dar nada por hecho.
Luego, la idea es tener una plantilla con dos o tres jugadores por puesto, incluyendo el arquero. Desde hace tiempo surgieron rumores sobre un supuesto malestar de Leonardo Burián con su sueldo, que no iría de la mano con la cotización del dólar. En reiteradas ocasiones el charrúa desmintió esto, pero la realidad es que la relación se fue fisurando con el paso del tiempo.
Tiene contrato vigente, pero algunos ya se aventuran a decir que se marchará del club. Esto no quita que el DT pida otro guardametas, pero sería también un detalle a no pasar por alto. Tanto es así que volvió a reflotarse el interés por César Rigamonti de Belgrano.
Cuando parecía que el nivel de Burián había mermado, en el partido de ida contra River de Uruguay mostró su capacidad siendo vital para mantener el 0-0. Es uno de los contratos más importantes y por eso la dirigencia estaría manejando algunas opciones. Por lo pronto habrá que aguardar, ya que el mercado de pases recién se abrió y sabiendo que el dinero no es lo que abunda, antes de la vuelta a los entrenamientos el 12 de junio, se podrá develar este misterio.
Tendrá suma injerencia el flamante director deportivo, Francisco Ferraro, que llegó para ser el nexo entre los dirigentes y el cuerpo técnico. “Me parece un acierto su llegada“, reconoció Lavallén en su última conferencia de prensa. Habrá que ver cómo se da todo…
Fuente: Uno Santa Fe
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