Personal de la cartera nacional de Ambiente, que conduce el ministro Juan Cabandié, se hizo presente en la planta de Nouryon Argentina, ubicada sobre calle Cittadini.

El miércoles pasado se registró una emanación -que sería SO-2 (Dióxido de Azufre)- desde la empresa química “Nouryon”, ubicada en calle Cittadini, zona sur de la ciudad de San Lorenzo, que afectó a vecinos de barrios aledaños.

Tras la denuncia de vecinos y del concejal de San Lorenzo Marcelo Remondino, clausuraron preventivamente la empresa. En tanto, el ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación llegó a la planta para investigar el hecho.

Los agentes nacionales tuvieron que aguardar largos minutos en la puerta de Nouryon para poder ingresar a inspeccionar.

Al respecto, Remondino aseveró  “es una empresa que contaminó toda la vida, hicieron reparaciones pero no evitan la contaminación. Así sucedió con las chimeneas”.

“Desde diciembre que los vecinos linderos de la fábrica venían reclamando a la Municipalidad, a la empresa y la semana pasada empezó a surgir un fuerte olor a ácido. En un momento la gente empezó a toser, tuvimos irritaciones en ojos y en vías respiratorias. Ahí di aviso al subsecretario de medio ambiente inmediatamente, fui testigo de lo que sucedió”, detalló el edil sanlorencino.

Asimismo, el dirigente dijo que “según ellos (la empresa), se les escapa el dióxido de azufre que luego nosotros respiramos. Hicimos un acta, la empresa quedó en que bajaría la producción”, y confirmó que “se clausuró preventivamente la empresa el día lunes, ese día no se podía estar ni siquiera en la puerta del lugar. Al lado hay una farmacéutica y los empleados a veces tienen que ponerse mascaras especiales, es gravísimo lo que sucede”.

“AL LADO HAY UNA FARMACÉUTICA Y LOS EMPLEADOS A VECES TIENEN QUE PONERSE MASCARAS ESPECIALES, ES GRAVÍSIMO LO QUE SUCEDE”

“El gran problema es que estos escapes pueden generar algo peor, con daños para la ciudadanía. No quiero alarmar, pero es lo que me informaron quienes saben al respecto en materia ambiental. La gran incógnita es saber que productor cancerígenos están utilizando en esta empresa”, concluyó Remondino.

Y finalmente, el concejal consideró que “son empresas a las que no se le invierte dinero, son obsoletas. Nosotros estamos averguando de donde proviene el capital de esta empresa, tenemos datos de que Nouryon podría pertenecer al famoso grupo inversor Blackrock, a los fondos buitres que sólo se interesan en números y nada más”.

Con información de Sin Mordaza

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