Fue en el marco del plan que lleva adelante el gobierno provincial. En diciembre comenzó la construcción de un centenar de viviendas. Además, se levantará un nuevo “alero”.

Una mezcla de sensaciones y sentimientos era lo que se podía apreciar en la mirada de los vecinos de Barrio Acería, en la mañana de este jueves. El motivo: se demolió la Torre 18, quinta en este proceso de urbanización, que tiene como objetivo principal reubicar a todas las familias en viviendas dignas.

“Esta demolición de la Torre 18 amerita hacer algo de historia reciente. El gobernador, hace un año y medio, anunció la transformación integral del barrio, que tiene 350 familias. Tiene 22 módulos con un deterioro estructural muy importante, producto de un abandono notable. Y tomamos una dura decisión política, que fue la de demoler los edificios. Y en paralelo, construir las primeras 102 viviendas para ubicar a los vecinos”, afirmó Diego Leone, secretario de Estado del Hábitat de la provincia de Santa Fe.

“Esto es un plan de transformación de 4 años que se ejecuta con fondos de la provincia, de lo que recuperamos de los impuestos. A pesar de estar viviendo en un momento de altísima inflación, el gobernador tomó la decisión de que la obra pública siga. Debemos hacerla en etapas para poder concretarla”, dijo Leone.

El proyecto se lleva a cabo en las tradicionales manzanas donde están los monoblocks que ya empezaron a demolerse, luego de reubicar a los habitantes que esperan la finalización de las nuevas casas. Este sector está delimitado por las calles Matheu, Cafferata, Azcuénaga, Edmundo Rosas y Viñas, y suma cuatro manzanas contiguas al barrio, comprendidas entre Azcuénaga, Edmundo Rosas, Ayacucho, Grandoli y Cafferata.

Dentro de dos meses habrá 25 viviendas listas y, progresivamente, se irá mudando a las familias que actualmente están en distintos domicilios, todos con alquileres a cargo de la provincia.

“Lo provechoso de esto es que las familias no van a perder el arraigo al barrio, porque van a poder seguir permaneciendo aquí, algo fundamental en procesos de este tipo. Acá hay gente que vive desde mediados de la década del ‘80, cuando se construyeron estas torres”, comentó el funcionario, quien además agregó que “éste es un proyecto de transformación integral, por eso tenemos como idea, junto al Ministerio de Cultura, de la creación del Club Sportivo Alero. En breve estarán los módulos y tenemos que aprovechar este gran espacio público, teniendo en cuenta que Acería era un barrio que carecía de estos lugares de calidad”.

Sobre el final de la charla, Leone aseguró que “como venimos avanzando en etapas, a priori la idea es demoler todas las torres. No obstante, cuando ya no queda gente dentro del edificio, se realiza una evaluación estructural para saber cómo está. Algunos pueden estar bien, pero el costo de ponerlos en condiciones y demolerlos y hacer unidades habitacionales nuevas es similar”.

Las casas nuevas

Se cambió la tipología de obra para ejecutar. No serán edificios de planta baja y tres pisos, sino viviendas unifamiliares de planta baja y planta alta. Algo que da resultados positivos y que permite aprovechar mejor el suelo. Tendrán toda la infraestructura necesaria, dentro de los 50 metros cuadrados de cada una, así como también dos dormitorios y patio. Las casas contarán con todos los servicios: cloacas, desagües y agua potable.

Las primeras 102 viviendas que se están construyendo corresponden a la primera etapa de un total de 436 unidades habitacionales.

Fuente: El Litoral