El fiscal Carlos Stornelli, procesado por espionaje ilegal, consideró que los chats de Marcelo D’Alessandro fueron obtenidos a través de espionaje ilegal con lo cual se trata de “prueba mal habida”.

La periodista especializada en judiciales Luciana Bertoia  repasó todo el recorrido de la causa que buscaba esclarecer los posibles delitos detrás de los chats filtrados de Marcelo D’Alessandro.

“Cuando se conocen los chats que se le atribuyen a Silvio Robles y Marcelo D’Alessandro hay un abogado que presenta una denuncia en los tribunales de Comodoro Py; se trata Gastón Marano, defensor de Nicolás Carrizo, jefe de los Copitos, que antes de asumir la defensa de Carrizo había estado en la Comisión de Inteligencia como asesor de un senador del PRO. Esa denuncia cae en el juzgado de Ariel Lijo, que está de vacaciones y es reemplazado por María Servini, ella dijo que no podía intervenir por tener un problema con D’Alessandro, y también se excusó el fiscal Carlos Rívolo porque aparecía como contacto frecuente de D’Alessandro. Finalmente, la causa termina en el juzgado de Capuchetti que como está de vacaciones, le queda a Ramos que le pide opinión al fiscal…que es Carlos Stornelli”, explicó.

Y continuó: “Antes, de que le caiga esta causa, Stornelli ya tenía la denuncia en sus manos que había hecho D’Alessandro diciendo que era víctima de espionaje ilegal y pedía que se investigue al diputado Rodolfo Tailhade. Stornelli impulsó esa denuncia y cuando llega la denuncia contra Robles que es sobre esa misma filtración, lo que hace Stornelli es decir que él ya estaba investigando esa filtración como espionaje ilegal y que los chats ya no se pueden investigar por ser prueba mal habida”.

La posibilidad de conocer el contenido de las conversaciones entre D’Alessandro y Robles, ya queda prácticamente descartada, sostuvo Bertoia: “Al no haber querellantes, no se puede apelar. Algunos dicen que Marano se apresuró a presentar la denuncia en Comodoro Py, sabiendo que esto terminaba así”.

Por su parte, la vicepresidenta repudió a través de su cuenta de Twitter, el accionar de “La mafia mediática-judicial” y denunció “la impunidad y el absurdo jurídico a cielo abierto. Es hora de despabilarse y advertir que están conduciendo a las instituciones hacia un callejón sin salida”.

Juicio Político

Consultada por el pedido de juicio a los ministros de la Corte que va a tratar la Cámara de Diputados la semana próxima, la periodista destacó: “La comisión se reúne la semana que viene y ahí van a tener que analizar el pedido y discutir la admisibilidad. En esa comisión el FdT tiene mayoría para aprobar el dictamen, el problema es en el recinto donde necesitan 2/3 de los votos”.

De todas maneras, “el FdT está mirando la historia, el proceso que se dio en 2002-2005 cuando Eduardo Duhalde pidió el juicio a todos los integrantes de la Corte de la mayoría automática, algo que fracasó. Cuando llega Kirchner empezaron los juicios a algunos de los integrantes de la Corte, solo fueron destituidos dos jueces, pero los otros tres terminan renunciando en el proceso. El FdT está pensando en exponer los desmanejos de la Corte para ver si públicamente los magistrados pueden sostener esa posición”.

Pedido de captura internacional contra el hermano de Miguel Ángel Cherutti

“Daniel Oscar Cherutti fue parte de la estructura de la SIDE que comandó los centros clandestinos de detención entre 1974 y 1982. El juez Rafecas pide su detención por su actuación en los centros clandestinos Bacacay y Automotores Orletti”, explicó Bertoia al tiempo que remarcó: “Se le imputan 110 secuestros, 19 homicidios, 5 robos de menores, y hay información acerca del contacto que mantuvo con el represor que actuó en Orletti, Miguel Furci, condenado por crímenes de lesa humanidad. En esas comunicaciones ese represor dio nombres de otros compañeros de la SIDE que habían actuado ahí, de víctimas, etc. Entre otros, mencionó a Cherutti a quien le decían ‘el Loco’”, indicó.

El represor, que es hermano del comediante Miguel Cherutti, estaría viviendo en Italia e Interpol ya emitió una alerta roja.

“Furci cuenta que Cherutti empieza a estar agobiado por los crímenes que había cometido y no podía dormir. Esto puede ser cierto, porque a él le dieron la jubilación a los 35 años, ya que venia de una larga licencia por enfermedad, así que es probable que esto tenga que ver con lo que se conoce como “fatiga de guerra”, las dolencias, insomnio que tenían los genocidas que secuestraban, torturaban y asesinaban”, finalizó la especialista.

Fuente: Radio Gráfica